La irregularidad de la regularidad

A fuerza de distribuir certificados de regularidad o de negarlos, la Gran Logia Unida de Inglaterra (antes llamada Gran Logia de Inglaterra, nacida a su vez de la Gran Logia de Londres y de Westminster), ha terminado por creerse y dotarse a sí misma de forma arbitraria y absurda de ser la única"regular" y de la decisión de quien lo es a su vez.
Como demuestra Ambelain, los padres de este desatino Ánderson y Desaguliers, ni siquiera fueron masones, nunca jamás fueron iniciados, son meros profanos, que carecen de autoridad masónica y que no tienen potestad para conferir, ni ellos ni los que dicen llamarse sus sucesores, ningún titulo que acredite un presunto y trasnochado pedigree.
Tanto Ánderson como Desaguliers eran clérigos protestantes y ocupaban en la logia los correspondientes cargos de capellanes, quien haya ido alguna vez a una logia de habla inglesa o a una Tenida de Gran Logia de mayoría inglesa, los ha visto y oído, su labor se limita al momento de oración tras el himno de apertura y antes del de cierre, y también habrá observado que no pertenecen a la logia. Aún se puede ir más lejos, y como señala Ambelain de los ocho primeros masones que constituyeron cuatro logias en 1714 en Londres (germen de la GLUI), ninguno de ellos había sido iniciado regularmente.
La nueva Gran Logia de Londres se otorgó a sí misma de forma unilateral y sin sentido alguno, una autoridad que para nada le corresponde y que no debía de detentar ni persona, ni entidad alguna, ya que supone una división, y discriminación que ha supuesto el pase de estos sectarios Hermanos a la constitución de meras logias-clubs, donde tener un rato de esparcimiento, jugar a la política, comer y beber, sin otra cosa que comprobar quien saca más su prominente barriga, obstentando el mandil más grande, con el que tapar sus grandes torpezas y falta de fraternidad.
¿Pero como se llegó a culminar este desaguisado?
En septiembre de 1715. algunos masones operativos tuvieron la idea de visitar la nueva logia constituida por estos siete masones no iniciados regularmente, y sus capellanes Ánderson y Desaguliers, siéndole impedido el acceso a la reunión, al parecer no eran de tan noble clase como los allí reunidos, creándose un cisma que no se solucionó hasta 1717.
La situación actual se deriva de este histórico arranque de la masonería especulativa, frente a la operativa del Londres de principios del siglo XVIII, de forma, que podemos afirmar sin rubor, que a excepción de las Logias Estuardistas que se habían formado en los regimientos exiliados de Saint Germain en Laye en torno al pretendiente estuardo al trono, todo el resto de logias son totalmente irregulares, y sus ritos de iniciación, no sólo carentes de esoterismo sino tambien de iniciación alguna.
El hecho de que se diga que la masonería fue fundada en 1717, con las bases establecidas en 1714, redunda más en su carácter manifiestamente irregular. A partir de 1723 consiguen imponer su autoritarismo y sus vacios criterios sobre las antiguas Hermandades operativas, que ya estaban prestas a desaparecer.
Ambelain señala que la masonería inglesa, a la vista de todo lo anteriormente expuesto, "ni siquiera se trata de una obediencia bastarda, puesto que los bastardos poseen la sangre y la raza que les reconocen las leyes de la nobleza".
Podemos concluir diciendo que... el interés que muestran las Grandes Logias y las Logias que precisan de la GLUI para así ser reconocidos masones regulares, nace de que para nada lo son, porque se precisa el reconocimiento cuando no se es lo que se quiere ser.
Bibliografía: Leyenda de la muerte de Hiram y la regularidad masónica "O.T.O."
S.C.H. y útlimo del Grado 33 para Norteamércia
Revista Internacional Hiram Abiff nº 55; 142; 144
Masonería Siglo XXI de 03/07/2011
Entre otros...